Cólicos en el bebé

Nuestros niños suelen padecer de cólicos durante sus primeros meses de vida. Esta condición es bastante molesta para los bebés, quienes pierden el apetito, se irritan o muestran serios dolores abdominales. A continuación te entregamos algunas medidas para detectar los cólicos que pueden perturbar la tranquilidad y salud de tu hijo.

¿Cómo identificar los cólicos del bebé?

Es común que los bebés lloren durante varias veces al día: por hambre, sueño, calor, etc. Sin embargo si se presentan estos llantos más de tres horas al día y en periodo de tres semanas es probable que tu bebé sufra de un trastorno conocido como “Cólicos del bebé”. Esto provoca que tu niño sufra dolor abdominal prolongado. ¡No te preocupes! esta condición es - dentro de todo- algo normal en los recién nacidos hasta los tres meses. Si luego de este periodo el dolor y malestar persisten, puede que se trate de alguna otra anomalía y debas consultar a tu pediatra.

Según el médico pediatra Dr. Paul Harris, académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile, estas son las medidas que se deberían tomar al momento de lidiar con un caso (o prevenir) de cólicos.

Por lo general, los bebés con cólicos flectan las rodillas hacia su pancita en un intento de, quizás, disminuir el dolor. Para el mismo efecto, a veces las extienden bruscamente para encontrar la comodidad que pueda disminuir el malestar.

¿Tratamiento? No hay un tratamiento real que “cure” los cólicos del bebé, pero hay medidas que se pueden tomar:

-       Siempre lo primero, es consultar al pediatra quien dará las directrices para actuar.

-       Evitar dar grandes cantidades de comida para evitar que el malestar siga incrementando.

-       El llanto del bebé se puede calmar si se cambia de posición, actividad o ambiente. Es por ello que una “solución” ante los cólicos es mecer al niño o sacarlo de la casa a dar una vuelta.

-       Poner música suave también puede ayudar a calmar tanto el malestar de los niños, como el sistema nervioso de las mamitas.

-       Ayudarle a eructar también es una buena manera de disminuir el riesgo de padecer futuro dolor abdominal. Como también poner al bebé boca abajo mientras se le sostiene con los brazos y se le soba suavemente su espaldita.

-       Puedes intentar también darle un baño tibio mientras se masajea su estómago.

Recuerda que todas estas medidas, son en conjunto con el cuidado de las mamás y los papás: mantener la calma ante todo y tratar de actuar conforme a la urgencia de las situaciones.