Cómo responder a las constantes preguntas de los niñ@s.
Es por eso que aquí te dejamos algunas directrices para que al momento de afrontar esta situación, puedas entregarle las herramientas que tu pequeñ@ necesita.
Recuerda que, detrás de cualquier pregunta, siempre la curiosidad de los niñ@s se basa en el descubrimiento de su entorno.
El porqué de los porqués según Vilma Medina, directora de GuiaInfantil.com:
Aunque no lo creas, este tipo de preguntas no sólo es una mera duda, sino que tu hij@ está desarrollando técnicas comunicativas: uno habla y el otro escucha, respeta los turnos de la conversación, etc. Por eso, muchas veces notarás que tu respuesta no es de su interés, lo que realmente le importa es que tú le contestes y que, después de otra pregunta, vuelva su turno.
Con las preguntas, l@s niñ@s:
- Practican la esencia de la conversación.
- Aprenden nuevas estructuras gramaticales.
- Desarrollan su imaginación.
- Disfrutan con el propio sentido de las palabras.
- Acaparan la atención.
- Sacian su curiosidad.
Entonces, ¿cómo responderles?
- Usa un lenguaje claro, fácil y comprensible. No temas a la fantasía. Puedes transformar su porqué en un cuento: “Mamá ¿por qué es de colores el arco iris?” “Porque los angelitos lo pintan así”.
- Si sus porqué son muy extensos, puedes hacer cambios. Tú eres el adulto y tienes el control. Si tu niñ@ tiene una pregunta muy extensa, puedes invertir la pregunta: “¿y tú por qué crees que puede ser?” Inmediatamente le sitúas en una nueva dimensión en la que las preguntas dejan de ser relevantes.
- No te sientas obligada a contestar a todo. A veces el “porque sí” puede perfectamente valer como una respuesta.
- Procura no acabar con vago “no sé”. Si lo haces dejarás abierta una incógnita lo que permitirá que se cuelen miedos y ansiedades.
- Evidentemente tú no puedes saber todo sobre todos los temas, pero hazle saber que si hay gente grande que lo sabe. Que en los libros hay muchas respuestas y que si quiere, pueden buscarlas juntos.
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