Mejora tu piel y circulación sanguínea con una ducha Detox

Esta sencilla técnica engloba contrastes de agua fría y caliente, y te permitirá tener una piel más cuidada y un mejor estado de salud. Conoce por qué los expertos la recomiendan, y toma nota de sus detalles y cuidados extra para que le saques el máximo beneficio.
A la hora de embellecer la piel, las técnicas son variadas: desde elegir frutas y alimentos que frenen la celulitis, hasta dedicarle tiempo al ejercicio. Pero hay otros aspectos clave -como el manejo de la temperatura corporal- que tienen muchísima relación con la tonicidad, el embellecimiento de la piel, la circulación –en especial en zonas como las piernas- y el mantenimiento del sistema inmunológico.
 
Es por esto que las llamadas duchas detox, que alternan agua fría y caliente, son saludables, relajantes y perfectas al despertar o bien, antes de acostarse. Los expertos, de hecho, recomiendan exponerse a esta combinación en distintos momentos del día para regular el organismo.
 
El agua caliente, según afirman, es perfecta para aumentar la circulación, eliminar la ansiedad y las tensiones, relajar los músculos y hasta aliviar las desagradables congestiones nasales de invierno. Mientras que el agua fría fortalece el sistema inmunológico, mejorando el retorno sanguíneo y ayudando a combatir infecciones.
 
La piel también se ve beneficiada con esta mezcla de temperaturas en la ducha. El agua caliente abre los poros y el agua fría –además de ser antiinflamatoria y tonificante- los cierra, lo que mejorará el aspecto general de tu dermis. Un fenómeno que también se aplica al pelo, el cual se mantendrá más brillante y con mejor aspecto, previniendo su caída. ¡Puros beneficios!
 
Pero, ¿cuál es el mejor proceso para darse una ducha detox y beneficiar tu piel? Según dictan los expertos en hidroterapia, lo que debes hacer es partir por la planta del pie para luego ir subiendo hacia la ingle. Y, como tratamiento adicional, se recomienda frotarse el cuerpo con una banda exfoliante más una mezcla de bicarbonato y agua.
 
Una variante posible de la ducha detox es el baño: si lo eliges, puedes deshacer sal gruesa en el interior del agua, más aceites esenciales y relajantes de lavanda y melisa. Cuando termines, aplícate aceite de coco puro en la piel a través de un masaje total. Si haces este ritual de belleza en las mañanas, el broche de oro lo pondrá un desayuno detox, que contenga té verde, fruta fresca y yogurt natural.
 
Un consejo importante que entregan los expertos en cuidado es terminar siempre la ducha detox con agua fría. Y además, usar una crema hidratante para que tu piel se mantenga elástica, más otras específicas como anticelulíticas o reafirmantes en el caso de que haya problemas como estrías, piel de naranja o flacidez, aplicándolas por la mañana y por la noche sobre la piel limpia y seca.
 
Ya lo sabes: para tratar bien tu piel, lo mejor es desintoxicarla de forma sencilla, cómoda y sin salir de casa. ¡Pruébalo!
 
Fuentes
hola.com
freshlycosmetics.com
costaclub.com








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