Las palomitas de maíz son más saludables de lo que pensabas

¿Sabías que las palomitas pueden reducir tu colesterol, regular tus niveles de azúcar, luchar contra el envejecimiento y hasta prevenir el cáncer? ¡Y con cinco veces menos calorías que una porción de papas fritas! Revelamos estos y más secretos sobre uno de los snacks favoritos de chicos y grandes.
Infaltables en el cine o en una junta con amigos frente al televisor, las palomitas de maíz tienen la mala fama de ser alimentos grasosos y azucarados. Pero esto sólo es cierto con las que vienen listas para microondas, repletas de aditivos poco saludables y exceso de sal y mantequilla. Las preparadas en casa con maíz natural, en cambio, están tan llenas de propiedades y beneficios que no deberían faltar en tu dieta ni en la de tus pequeños.
 
Estudios científicos recientes, entre los que destaca el de la Sociedad Americana de Química, revelan que un puñado de palomitas tiene múltiples propiedades para la salud. Incluso, cuenta con más y mejores antioxidantes que una porción de frutas o verduras. Entre ellos están los polifenoles, poderosos agentes que previenen los síntomas del envejecimiento, como arrugas, manchas, ceguera, debilidad muscular, deterioro cognitivo, osteoporosis, mal de Alzheimer, demencia y pérdida de cabello, entre muchas otras. También puede prevenir la aparición de la enfermedad de Parkinson y diversos tipos de cáncer.
 
Una taza de palomitas tiene apenas 30 calorías, cinco veces menos que la misma porción de papas fritas. Además, sus altos niveles de fibra (10 gramos por cada 100 gramos) te producen muy rápido niveles de saciedad que inhiben la liberación de la grelina, conocida como la hormona del hambre. También ayudan a tu digestión y pueden reducir el colesterol y los triglicéridos, disminuyendo el riesgo de sufrir arteriosclerosis, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
 
Gracias a la fibra, también, los expertos las recomiendan para regular la gestión de azúcar en la sangre y los niveles de insulina en personas con diabetes.
 
Además son claves en proporcionarte minerales, vitaminas del grupo B (B1, B3 y B9), que son las que actúan ante el sistema nervioso, y vitamina E (más de 11 mg por cada 100 gramos), que beneficia a tu sistema circulatorio. Y su alto contenido en carbohidratos las hacen un alimento ideal para niños y deportistas.
 
En tanto, su harina las hace perfectas para quienes sufren de alergias o intolerancia al gluten. También se recomiendan para suplir la deficiencia de magnesio.
 
Y como si todo lo anterior fuera poco, las sedas o estigmas (las hebras que se ven debajo y a lo largo del maíz) se usan como infusiones diuréticas que protegen contra la hipertensión, la retención de líquidos y contribuyen a sanar de infecciones urinarias.
 
Así que no hay razón alguna para desconfiar de una exquisita porción de palomitas de maíz para compartir con tus hijos. Eso sí, siempre con moderación y cocinadas en forma sana, usando maíz natural, sin sal y con un máximo de 2 a 3 cucharadas de aceite de oliva.
 
¿No sabes cómo hacerlas? Muy simple: cubre una sartén con aceite de oliva, caliéntalo, añade los granos de maíz –cuidando que no se apelotonen- y tapa dejando un hueco pequeño para que el vapor pueda salir. Apenas las palomitas empiecen a explotar baja la temperatura a fuego medio. Cuando se dejen de escuchar, ya estarán todas listas. Apaga el fuego, destapa, sirve y disfruta sin culpas.
 
Fuentes:
Mejorconsalud
Natursan
Eju.tv








Comentarios


Compartir