El primer día con mi hijo, solos

Sabemos que ser madre es una labor increíble, que trae consigo una conexión especial desde que el pequeño está en el vientre, es por esto que la primera vez que tienes que confiar en el papá para que cuide a su regalón puede ser toda una experiencia para ambos.

Quedarse solo con el hijo mientras mamá sale, puede ser toda una aventura y un momento único entre papá y niño. Diversos padres nos comentan sus historias y anécdotas sobre este mágico e importante día.

Comúnmente mamá prepara cada detalle, para que nada quede al azar en su ausencia, desde los pañales que usará el bebé, hasta la ropa que va a llevar –para que papá no se emocione colocándole el traje de superhéroe que le compró-.

 “Recuerdo que ambos nos mirábamos con cara de ‘vuelve pronto’, porque no sabíamos de una u otra forma qué iba a pasar, teníamos miedo”, dice Hernán sobre su experiencia.

 “La primera vez que me quedé con mi hija, fue bacán, porque era muy desordenada. Aunque lo que más recuerdo fue cuando fuimos a la plaza juntos. Ahí jugamos toda la tarde”. Nos comenta Jorge, sobre la relación con su hija.

 Hemos visto tantas imágenes, videos u otras cosas sobre cómo son los papás con sus hijos cuando mamá no está, que nos condicionamos por el saber qué está pasando en nuestra ausencia. “Recuerdo que apenas mi señora salió de la casa, lo único que quería era jugar con mi hijo, pero no pasaron ni 5 minutos y estaba durmiendo. Lo bueno es que cuando despertó estaba con toda la cuerda y las pilas cargadas para jugar. Aunque él no puede hablar, yo sentía que con su risa él me demostraba su amor” nos explicaba Mauro. “Fue una jornada tranquila, porque estuve muy preocupado de sus cosas, (pañales, ropa, leche, etc). Pero el momento más tenso, fue cuando vi que se me estaba acabando la leche de reserva y la mamá aún no llegaba. De hecho, cuando comenzó a llorar de hambre no sabía ya cómo calmarlo” agrega. “Cuando mi señora llegó, hubo un silencio completo, incluso mi hijo dejó de llorar. Todos estábamos felices de que llegara”. Si bien el final no fue lo que esperaba Mauro, dice que no cambia por nada estar con su pequeño. “Si fuese por mí, pasaría días completos con mi hijo, pero obvio, con una reserva de leche más grande”.

 Tal como estos padres, hay muchas experiencias que nos pueden ayudar a ser mejores. Cuéntanos tu historia en la caja de comentarios.

 

 









Comentarios


Compartir